El zurdo que todos llevamos dentro

Levantarse con el pie izquierdo se ha convertido en un símbolo de la mala suerte. Si una mañana nos traicionan los reflejos y nuestra capacidad motora no anda muy fina literalmente nos jodímos.

Osea que ser zurdo desde el primer minuto es la peor maldición que podemos tener. ¿Y a quién carajo se le ocurrió que ser zurdo es malo?. ¿Maradona no era zurdo acaso? Tremendo talento para jalar, marcas por supuesto. En el Perú, los aliancistas siempre se acuerdan del buenote de Cesar Cueto, que además de ser zurdo era poeta.

Claro que también hay personas que sufren la mala suerte siendo izquierdos (que le vamos a hacer a la estadística, siempre hay un desafortunado). Solo hay que recordar al símbolo de la desgracia zurda, al buen "mi pie izquierdo" que para concha de su desgracia lo único que le funcionaba era, obviamente, su pie izquierdo, que estrictamente hablando sería como que a un eunuco, el único bien que le quedara en la vida fuera un vibrador.

Pero no hay que menospreciar al zurdo por su inferioridad (o sea porque son menos numéricamente hablando. No es para ofenderse). Ellos han cambiado el curso del siglo veinte, porque hay que ver cuando los que escriben con la otra mano salen a la calle en grupo, los desbarajustes que hacen. Si no pregúntenle al zar de Rusia cómo una noche los benditos zurdos comenzaron una revolución mundial en su mismísimo cuarto, y a medianoche para colmo, justo cuando el pobrecito estaba poniéndose pijama, O sea que lo agarraron literalmente con la monarquía por las rodillas.

Y miren luego como los chinos imitaron a los izquierdos rusos igualito (por supuesto que un "igualito" a la versión china, o sea totalmente diferente, con más arroz en la panza, y un gran timonel que de tanto ir para la siniestra terminó haciendo el viaje en círculos).

Hasta que los gringos llegaron con toda su filosofía antizurdos, los muy diestros, y los convencieron de que patear la pelota con derecha era más cómodo. Y miren como los chinos fueron al mundial la vez pasada. Así que tal mal no les ha ido, aunque en algunos chifas todavía cogen los palitos chinos con la otra mano. ¿Cómo le dirán los chinos a los palitos chino? ¿palitos?

Bueno, un saludo a todos los zurdos que me caen bien. Lástima que ustedes vean el mundo desde el lado equivocado, es decir desde el lado de la otra mano. Pero que bien que juegan al fútbol.